- Uruguay se consagró campeón de la CONMEBOL Copa América™ por séptima vez en su historia.
- En esta edición participaron Argentina, Chile, Perú y Uruguay.
Luego del cruce entre argentinos y uruguayos en la final de la Copa Mundial de la FIFA 1930, donde los uruguayos se llevaron el título en el Estadio Centenario de Montevideo, la CONMEBOL Copa América™ se tomó una pausa debido a las polémicas entre ambas selecciones.
Volvió en 1935 con Lima como sede central y la particularidad de que, para mantener un tono más neutro y menos nacionalista, ninguna de las selecciones rioplatenses llevó su camiseta oficial, Uruguay utilizó una camiseta roja con detalles blancos y Argentina una toda blanca.
Uruguay se consagró campeón, dejando a la Argentina en el segundo lugar tras derrotarla por 3 a 0.
La elección de Lima como sede, coincide con los festejos de los 400 años de la fundación de la capital de Perú.
Perú venció a Chile 1 a 0 con la particularidad que ambos equipos utilizaron camisetas blancas. Aprovechando la coincidencia los futbolistas se tomaron, ambos equipos juntos, la tradicional foto de equipo previa al partido.
El 6 de enero cuando se enfrentaron Argentina y Chile, se dio el primer cambio en las competencias oficiales sudamericanas. A los 44’ del primer tiempo, Moisés Avilés le dejó su lugar a Enrique Sorrel, el cambio fue fácil de identificar porque Sorrel usaba una boina blanca, en épocas que los árbitros dirigían a los gritos y no existían los carteles con indicaciones.
Herminio Masantonio, de Argentina, fue el goleador del torneo con cuatro tantos, uno a Chile y tres a Perú. Masantonio sumó 21 goles en 19 partidos con la selección, uno de los promedios más altos de la historia de la Albiceleste.
Uruguay y Argentina se ganaron en este torneo el derecho a participar de los Juegos Olímpicos de Berlín 1936, pero ninguna de las selecciones pudo enviar planteles por problemas económicos. En su lugar viajó Perú, que derrotó a Finlandia y a Austria, por ese entonces una potencia futbolística, sin embargo, por incidentes que nunca quedaron claros, el COI hizo repetir el juego entre peruanos y austriacos a puertas cerradas, provocando la posterior renuncia del equipo sudamericano.
CONMEBOL.com / OPTA